LA FÓRMULA

Para conseguir el mejor helado

Todas las creaciones se formulan buscando la proporción adecuada de cada uno de los ingredientes, consiguiendo un equilibrio perfecto que sorprende gratamente.

Trabajamos siempre guiados por la excelencia, desde la concepción y formulación de un nuevo helado hasta cada una de las fases de elaboración y presentación final del producto.

La materia prima

DE ORIGEN NATURAL Y DE ALTA CALIDAD

Partiendo de una pasión innata por la búsqueda de la excelencia del producto, elaboramos nuestros helados con materias primas naturales y de altísima calidad que seleccionamos en origen, priorizando siempre que es posible los productores de proximidad.

Todos los ingredientes son tratados con la máxima delicadeza para extraer su esencia más pura, trabajándolos previamente en nuestro obrador o incorporándolos directamente durante el proceso de pasteurización o maduración. De esta forma, conseguimos extraer toda la intensidad del sabor y textura para crear un helado totalmente natural sin aromas añadidos ni colorantes artificiales.

Creatividad

PARA DESARROLLAR CUALQUIER SABOR

Con el dominio de la técnica y una gran dosis de imaginación todos los sabores que se puedan imaginar son posibles. Desde los más tradicionales, como el de vainilla antigua o el de chocolate, a los más extravagantes, como el de espárragos verdes a la brasa o el de angulas. Como parte de un entrante, un plato principal o un postre, las fronteras entre el dulce y el salado no existen para nosotros.

Somos capaces de transformar en helado todas las peticiones de nuestros clientes, adaptándonos también a la intensidad y al sabor del entorno, así como personalizarlo y aportarle todos aquellos matices que nos solicitan.

Elaboración artesanal

Y FORMULACIONES ÚNICAS

Todos nuestros helados se producen en el obrador de forma artesanal, siguiendo un riguroso proceso de elaboración que se aleja de los cánones industriales y asegura un resultado excepcional en sabor, textura y cremosidad.

Desarrollamos formulaciones diferentes de un mismo sabor para adaptar nuestros helados a su temperatura de conservación y consumo. De este modo, conseguimos que nuestras cremas y sorbetes para la restauración y punto de venta mantengan una textura perfecta a una temperatura de servicio de -18ºC, y las creaciones para heladerías la mantengan a -11ºC.

Además, para preservar totalmente sus cualidades hasta llegar a la cuchara solo los distribuimos en establecimientos que velan por la calidad de sus productos a la hora de conservarlos y servirlos a los consumidores.

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